En busca del político honrado

Hay días en que te levantas porque no te queda otro remedio. Desearías permanecer en la cama. Quizás por el que desanimo te embarga;  o tal vez porque el mundo que te rodea parece haber perdido el sentido. Enciendes el televisor, coges el periódico y todo sigue permaneciendo inalterable; políticos corruptos que con cada nuevo amanecer sumergen de las tinieblas.

¿Qué ha sucedido con los valores que el ser humano tenía? No quiero pensar que solo les acompaña el fondo económico. Me niego a creer que hemos perdido tanto en pocas décadas de soberbia económica; y que ahora tras la austeridad tan convenientemente proclamada por este insidioso gobierno, solo queda la miseria, la pobreza y los sinvergüenzas que disfrutan de nuestra precariedad.

¿Adónde marchó la honradez?

Todos los partidos se tiran piedras y acusaciones.

Pero… yo me pregunto inquieta ¿Porqué antes permanecieron callados? ¿Por qué cuando votaron todos sin excepción, la suculenta paga vitalicia, guardaban un conveniente silencio?

Tengo la dolorosa sensación de que la corrupción llega a todos los niveles y partidos y que mientras no haya un barrido absoluto de políticos corruptos que den con sus huesos en la cárcel, el caos seguirá llevándonos precipitadamente a un peligroso pozo lleno de una profunda oscuridad.