Si
tus manos alcanzasen a tocar mi cuerpo, no sería una fría losa mi perpetua
compañera, ni
los días serian noches y las noches no serian eternas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
El dolor del alma
«Nadie podía imaginar, cuántas veces había muerto mi alma con una sonrisa vacía en el rostro que destrozaba poco a poco mi dolido corazón»...
-
Oculta, la luna sueña piensa en nácar besos y tibias caricias, en una carroza su ilusión, en un corcel la desazón. Vestida de blanco satén... -
Somos parte de un rumor. Las personas hablan, yo también. Pero estamos rodeados por el silencio de los desesperados. El corazón sigue...
Precioso.
ResponderEliminarGracias nury, besos
ResponderEliminarDe ensueño... muy lindo +Nuria Escritora
ResponderEliminarGracias Fernando, abrazos
Eliminar